Una visión futurista para la mujer segura, audaz y vanguardista, destacando detalles icónicos de cada una de las décadas. Esto fue lo que presentó Marc Jacobs en la semana de la moda de Nueva York con su colección Pret A Porter de Primavera-Verano 2017.
Un desfile sorprendente, lleno de grandes detalles con el fin de transportarnos a diferentes épocas, dando un recorrido regresivo del siglo actual al pasado, comenzando con un futuro incierto con materiales metalizados, blancos sucios, pero con detalles del siglo pasado, los 90 con esas líneas puras y prenda de cortes definidos, que permiten ver la siluetas espigadas de las modelos. Los 80 estuvieron presentes con ese volumen excesivo en los hombros, detalles como drapeado, plumas, aplicaciones, los inolvidable 70 los cuales los vemos en los pantalones acampanados y los hot pants clásicos hasta llegar a los resacados, permitiendo ver los glúteos, los 60 con esas botas a la pantorrilla, la eminente minifalda y la siluetas línea A.
Lo más destacable es el estilismo de los peinados desenfadados, restructurados, pero a la ves coordinados para que armonizaran con los outfis tiene esa influencia de los 70 pero que siempre serán actuales, y no olvidemos ese maquillaje decadente pero limpio a la ves como si fuera un payaso glamoroso.
Es importante enfatizar esas plataformas sorprendentes, no solo por su altura si no la composición de colores, terminados, la audacia de las modelos para poder desplazarse a lo largo de la pasarela. Como si quisieran conquistar estéticamente el planeta y que destacan en el concepto de la colección.
Poniendo de manifiesto que su marca propone moda accesible con grandes detalles con prendas casuales llenos de color, con materiales cotidianos. Los complementos como corbatas, cinturones pañoletas logrando detalles juveniles.
Esta colección que nos presenta Jacobs, es una propuesta viendo al futuro , demostrando que es un diseñador sensible con el uso de los materiales, y eso se puede apreciar en las chaquetas y abrigos que hace destacar la silueta femenina, el mezclar técnicas de bordado, estampado y aplicaciones de pedrería, los cuales se resumen en prendas que son obras magistrales destacables para dar cierre a esta gran semana de la moda Fashion Week.
Todo esto sucedió en una atmosfera lograda con una iluminación decadente y una música alternativa despertado varias emociones a lo largo de la presentación, dejando un sentimiento de nostalgia de cada una de las épocas, Marc solo salió un instante al final del show para recibir el reconocimiento de todos los invitados.
Una colección extensa, nutrida de detalles y sorprendente en su conjunto, un diseñador movido por su afán de diversificar su aprecio por el universo y celebrando la moda americana actual. La personalidad de la marca Marc Jacobs, ha sabido crecer y madurar al tiempo, que lo hace la sociedad global.
Elaborado por Rocio Segovia.
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